Neuromarketing: Vendiéndole al cerebro
Durante muchos años la mercadotecnia ha ido cambiando su forma de acercarse al consumidor, pasando por diferentes facetas y formas.
Los mercadólogos siempre buscan la mejor forma de ofrecerle un producto al consumidor para que éste elija su producto en vez del de la competencia. Se han inventado infinitas formas de interactuar con el consumidor y de hacerle llegar un mensaje, desde darle la información directa, hasta usar mensajes subliminales.
Ahora existe una nueva forma de mercadotecnia llamada “neuromarketing”, que como bien lo dice su nombre se enfoca en nuestro proceso neuronal y cerebral.
De acuerdo al modelo propuesto por Paul MacLean existe un cerebro triuno (dividido en tres partes) dependiendo de la evolución del ser vivo, cada uno de estos niveles recibe otro tipo de información y reacciona diferente a cada tipo de información. Los humanos contamos con los tres.
Los niveles son los siguientes:
Cerebro Reptiliano.- Controla el comportamiento y el pensamiento instintivo para sobrevivir.
Cerebro Límbico.- Controla la parte emocional de las personas.
Neo córtex.- Es el encargado de nuestro pensamiento racional.
Si ponemos atención a la publicidad que vemos día a día podemos ver cómo cada una se enfoca en un cerebro. Por ejemplo: Axe = Reptiliano, Suavitel = Límbico, Actinver = Neo córtex.
Lo más interesante del “neuromarketing” son el tipo de estudios de mercado, en donde en vez de usar los métodos comunes como encuestas o focus groups, se hace un estudio personal y un encefalograma, en donde se mide la respuesta cerebral hacia ciertos tipos de productos, colores, aromas, imágenes etc…
Un estudio publicado en 2004 por el grupo Read Montague logró explicar la razón por la que la mayoría de la gente prefiere Coca-Cola sobre Pepsi. Cuando las personas tomaban Pepsi la parte del cerebro en donde se presentaba actividad era en el área que nos da satisfacción por una acción presente. Pero cuando los participantes tomaban Coca-Cola el área del cerebro con actividad eran las memorias, momentos felices de la persona y recuerdos. Esto significa que cuando vemos una Pepsi únicamente pensamos en refrescarnos, pero al ver una Coca-Cola pensamos en memorias agradables y momentos felices de nuestra vida, así que relacionamos esa felicidad con Coca-Cola y la consumimos buscando crear más de esos recuerdos. Es por eso que los anuncios de Coca-Cola siempre hablan sobre felicidad, ser buenos, pasarla bien, estar con la familia y amigos, evitando hablar sobre las características de su producto. A diferencia de Pepsi que nos presenta personas famosas en su publicidad para intentar que la gente se relacione con ellos más que con la marca.
Un día más culto
